domingo, 14 de octubre de 2012

Me encontré con Marc a la 1:24 de la tarde + cuarenta y tres segundos. Si mi reloj contara las centésimas, de seguro todavía las recordaría.

Al verme dijo tener hambre, pero yo no tenía comida ni cómo comprarla. Fuimos al Rumichaca a pedir aquellas verduras que los propios vendedores, tras una breve disputa, confesaban sin valor comercial. 

Comimos entonces lo que Marc Spraise llamó un "sancocho fosforescente". 

Mientras tanto, le conté que yo había grabado este video.


"Esa no es tu voz", me respondió, aunque aclaró que ello no significaba que no me creyera.

¿Qué opinas? Le pregunté luego. Sonrió y no dijo nada. Bueno, dijo esto



y esto




y esto




Pero sospecho que quiso decir "nada".

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